(Correo del Orinoco)-. El ministro de Planificación sostiene que el lapso 2025-2031 representa la primera ventana abierta de toda nuestra historia para la edificación de la democracia directa y participativa, la transformación de la sociedad, la consolidación del poder comunal. “Tenemos Presidente, tenemos pueblo y tenemos el plan vinculado al desarrollo de la nación”, indica.
El tiempo que se inicia el 2025 hasta el 2031 representa la primera ventana abierta de toda nuestra historia, en más de 500 años, con la que se abre una oportunidad concreta de descolonizar el territorio venezolano, de descolonizar a la nación. Nos enrumbamos definitivamente hacia la construcción del futuro, la transformación del Estado, la edificación de la verdadera democracia directa y participativa, la consolidación del poder comunal, es decir, la transformación histórico social, la transformación de la sociedad como un todo. Lo dice, lo afirma, lo asegura y lo reitera, el ministro de Planificación, Ricardo Menéndez.
Menéndez extrae insumos de los aspectos singulares del Congreso del Bloque Histórico, realizado el mes pasado, para sustentar su batería de argumentos, que más que argumentos son certezas , ya que las propuestas de ese importante evento, fueron recibidas por el presidente Nicolás, como el Programa de Gobierno para el periodo que se inicia el próximo 10 de enero, fecha de su juramentación ante la Asamblea Nacional y el pueblo.
Dice de entrada que el Congreso del Bloque Histórico se corresponde con una amplia convocatoria de todas las bases sociales, de aquellos que se sienten bolivarianos, chavistas, los que participan en la construcción de un país y, sobre todo, lo que significa la definición de los grandes consensos, en cuanto a la transformación de nuestro país.
“Pareciera”, sostiene, “que en esta coyuntura, un primer consensos tiene que ver con la defensa de nuestra soberanía, la defensa de nuestra independencia, la defensa de la concepción bolivariana de la República; reconocernos en Bolívar y, por supuesto, algunos temas relacionados con la intervención de un país como es el nuestro, con respecto a las denominadas sanciones o medidas coercitivas unilaterales; también lo que corresponde a la defensa de la paz como una premisa atinente a la nación y, adicionalmente, lo que es la integridad territorial. Esos aspectos que nos unifican como nación, es lo que en su momento Antonio Gramsci podría haber configurado como si fueran los términos asociados a lo que unifica, lo que corresponde a nuevas visiones de desarrollo de un país. Eso pareciera que son aspectos generales, que algunos representan simplemente defender la soberanía, defender la independencia, defender el concepto de nación, pero es muy importante ver la profundidad que tienen en la coyuntura histórica donde nos encontramos en este momento. Es una coyuntura histórica donde estamos saliendo de una guerra muy fuerte contra el país, una guerra que ha tenido que ver con violentar el concepto de nación, que ha procurado destruir la República. Es decir, que reconocernos en lo que queremos la república, los que queremos el país, la nación, representan un elemento fundamental, sobre todo cuando estamos próximos a la juramentación del presidente de la República y enrrumbarnos definitivamente hacia la construcción del futuro”, dice Menéndez, un ministro de quien, por los predios de Planificación, emana una atmósfera de respeto y de admiración.
“Era muy aplicado en la universidad; sus notas eran 19 o 20. Se graduó summa cum laude”, dicen.
Nueva plataforma de desarrollo
Para Menéndez, los aspectos mencionados son trascendentes porque el tema de fondo de la coyuntura actual consiste en precisar qué cosas se fueron afectando en estos diez, quince años últimos, y qué oportunidades se presentan para una nueva formación histórico social. “Cuando uno dice una formación histórico social, está hablando de las bases fundamentales de un modelo social, es decir, no es una gestión de Gobierno, no es simplemente un hecho coyuntural, un acto administrativo, o quien es ministro, alcalde, quien es gobernador.
Cuando hablamos de una formación histórico social, nos referimos a las propias formas de relación de producción de una sociedad, estamos hablando de las relaciones económicas, estamos hablando de la formación de una categoría, de lo social, lo cultural, de lo ético, lo ideológico, lo político, lo territorial, es decir, una transformación histórico social es la transformación de la sociedad como un todo, pero, adicionalmente, en esa concepción de esa sociedad, el tiempo que empieza desde el 2025 al 2031 (aquí entra su testimonio completo) es la primera es la primera ventana de toda nuestra historia en estos500 años, donde se abre una oportunidad concreta de descolonizar el territorio venezolano, descolonizar a la nación. El imperialismo se encargó de destruir el precario equilibrio que ellos tenían para socavar las bases económicas de la República, con las guerras que generaron.
A nosotros se nos abren las puertas, con la recuperación económica que inicia y con la reorganización del aparato económico productivo, de generar una nueva plataforma de desarrollo, o cómo podemos generar los motores de la economía productiva, cómo diversificar el aparato económico productivo, cómo podemos repoblar el territorio nacional a partir de nuestras nuevas especializaciones económicas productivas, qué podemos hacer con el bono demográfico, qué podemos hacer con cada uno de los aspectos de una nueva visión de desarrollo en Venezuela. Estos aspectos son cruciales, son el primer aspecto desde la visión del Bloque Histórico, que tienen que ver con las condiciones de agrupación de fuerzas para orientarse hacia una nueva formación histórico social”.
Continúa Menéndez, diciendo, a través de preguntas y respuestas, que tenemos las bases sociales, que son las que se han convocados, que son todos los venezolanos, ¿para qué se están convocando? Para una nueva formación histórico social ¿Con qué se están convocando para esa nueva formación histórico social? Con un plan ¿quién hace ese plan? Ese plan ha salido de las bases populares, ya que el presidente de la República lo había generado en el 2018.
“Eso se dice rápido, de manera fácil, pero tiene una carga conceptual, tiene una carga programática y una carga en el sentido político e ideológico”, afirma.
-¿Del documento que entregaron al Presidente, que aspectos resaltaría usted?
-Teníamos tres grandes productos, se generaron algunos adicionales como consecuencia de las asambleas. Los productos planteados inicialmente tenían que ver con la visión programática, que es la construcción de la agenda concreta de acción, que es un tema inédito en Venezuela. Tiene que ver que, cuando iniciamos las asambleas a nivel de las comunidades, cada comunidad hizo su Agenda Concreta de Acción, es decir, su propio plan de desarrollo para su comunidad, luego al ir a la comuna o circuito comunal, se hacía el plan de desarrollo asociado a esa escala, es decir, yo puedo tener un plan de desarrollo específico vinculado al barrio y puedo tener un plan asociado al sector urbano. De manera que logramos tener la ACA, Agenda Concreta de Acción para la comunidad, Agenda Concreta de Acción para el sector urbano o circuito comunal que estamos trabajando, adicionalmente, unos grandes agregados por sectores. Entonces, tenemos la Agenda Concreta de Acción de agua, de electricidad, de transporte público, de la economía, de Pdvsa, de la minería, de lo concerniente a la industria, al turismo, de allí que se logró tener una visión programática.
Ajustes a las 7T
Detalla el ministro que un primer documento es el ACA: Agenda Concreta de Acción. Un segundo documento correspondió a la visión de transformación del Estado cómo queremos desburocratizar, que debemos hacer para la lucha contra la corrupción, cómo queremos crear nuevos espacios desde el punto de vista de Gobierno. Un tercer documento correspondió a la visión a 30 años, en el 2054, cuando se entrará en el centenario del comandante Chávez, y cómo nos vemos para esa fecha en esa visión un poco más amplia en relación al desarrollo. Esa visión es muy importante porque, pensar el país a 30 años, permite proyectar en torno a una conexión de rutas de esperanzas, de rutas hacia el futuro.
Precisa Menéndez que quizá el documento más importante que salió del producto del Congreso del Bloque Histórico fue un ajuste y una precisión en la formulación del Plan de las 7 Grandes Transformaciones, que se asumirá como el plan de gobierno en el próximo periodo.
“Es un tema muy importante porque nosotros tenemos presidente, tenemos pueblo y tenemos el plan vinculado al desarrollo de la nación”, sustenta.
La adecuación del plan de las 7 Grandes Transformaciones permitió unificar criterios. El primero, acoge todo lo que tiene que ver con lo económico, la reestructuración relacionada con la economía productiva, la reestructuración asociada al caso Pdvsa, que es uno de los aspectos de la industria petrolera que salió con mucha fuerza; lo que correspondió a las formas de distribución del ingreso, del bienestar de la familia, de la población. En la segunda T, a partir de los debates, de las reflexiones del Presidente de la República, emergió el tema del derecho a la ciudad para el buen vivir, los servicios. En la tercera T se mantiene el aspecto de la seguridad y defensa. La cuarta T conserva lo atinente a la protección social, con mucho énfasis en la salud y la educación. La quinta T se corresponde con la transformación política, donde destacan varios aspectos, como la lucha contra la corrupción, lalucha por la desburocratización, pero con epicentro en los circuitos comunales, donde el epicentro en la comuna brota con una fuerza enorme. La sexta T se reformula, pasa a ser ecosocialismo y la ciencia y la tecnología, como grandes desafíos de la sociedad. La séptima T mantiene la geopolítica.
EN LA ONDA DEL PODER POPULAR
“Desde el punto de vista de victoria del Congreso del Bloque Histórico, el tener un presidente reelecto y tener un plan formulado por más de 101.000 asambleas, más de 3,6 millones de personas, supone una fuerza muy grande, relacionada con la unificación de las premisas, de los criterios, para poder construir el próximo periodo presidencial. Otro de los aspectos centrales que sale del Congreso tiene que ver con las nuevas formas de gobierno.
Es probablemente el elemento de mayor fuerza en torno a cómo se construye una democracia directa y en esa construcción de la democracia directa, el rol del Poder Popular, el rol del consejo comunal, el rol de la comuna, pero no como escala solamente, sino como un árbol que crece a lo largo de todas las ramas de organización del Estado venezolano, que no se circunscribe el Poder Popular a lo local, no se queda aislado, sino que tienen que haber ministerios realmente del Poder Popular.
Tenemos que estar constituidos por ese Poder Popular en todas las escalas. El presidente de la República, por ejemplo, el día de hoy (el martes pasado), en lo que fue la defensa del presupuesto ante
la AN, instruyó lo concerniente a la consignación de dos instrumentos legales que son de amplia importancia. Uno corresponde a la reforma de la ley asociada al componente financiero del Estado, de la ley que emana la organización del presupuesto. Por vez primera, en la propuesta que llevó la vicepresidenta de la República, Delcy Rodríguez, en nombre del Presidente, se plantea que los ACA,
las Agendas Concretas de Acción, que se hacen en las comunidades, tienen que ser vinculantes con la formulación del presupuesto nacional. Es un elemento de gran importancia estratégica y es un logro en cuanto a las instrucciones que el Presidente planteara a partir del cierre del Congreso del Bloque Histórico. Otro componente tiene que ver con la reforma de la Ley de Planificación Pública y Popular, en la que se plantea todo un sistema donde es precisamente el Poder Popular el epicentro, no solamente de la planificación, sino del sistema de gestión, de gobierno. Ahí emerge con mucha fuerza la organización de la escala de gobierno comunal, la escala de un punto de encuentro dentro del circuito comunal, como una nueva forma de organización en el caso del Estado venezolano”.
Ricardo Menéndez.